1 de abril de 2009

DAFNIS EL HADA DEL LADO


Fabia había ido a coger agua al lago, en aquel inmenso paraje rodeado de montañas, grandes abetos y un lago azul como el cielo vivían varias familias, eran unas casas hechas de madera noble, pintadas de color verde, que en ocasiones se confundían con los árboles.
Vivían de los productos que la naturaleza les había regalado, el agua del lago, los alimentos del bosque y de sus propias manos, tenían unos huertos de verduras y todo tipo de frutas. Cada día Fabía salía con su cántaro a coger agua para beber, el camino no era largo, pero ese día le extraño que no hubiera ningún animal por el camino. Cuando llego al borde de la orilla vio algo impensable, el agua se había teñido de color rojizo, y el olor era imposible de soportar. Se le cayó de las manos el cántaro y empezó a llorar. Apareció Dafnis, una pequeña hada, no media más de cinco centímetros, era muy bella, tenía unas alas transparentes y el pelo le llagaba a la cadera, se poso en el hombro de Fabia e intentó consolarla. Pero Fabía estaba tremendamente afectada, ¿Quién había podido hacer aquello?, ¿Qué era lo que había infectado el agua de aquel maravilloso lago?. Dafnis escucho todos los pensamientos de aquella mujer, sabía el sufrimiento que le causaba decidió ir a buscar al culpable de aquel horror. Dafnis una nixie, se marcho volando por las montañas, en busca de la causa de ese desastre. Al llegar al pico de Brindies observo que en la ladera de la montaña había un grupo de hombres, máquinas taladoras y toda clase de instrumentos mecánicos, Dafni empezó a enfurecerse, estos estaban talando los árboles, contaminando el agua con gases y el combustible, estaban destruyendo su forma de vida, se acerco a ellos y en aquel momento se transformo en una bella mujer, tan hermosa que todos dejaron de trabajar. Ella, los embeleso de tal forma que se transformaron en peces, una especie limpiadora, que se tragaba todo la contaminación del agua, los guió hacía el lago y empezaron a tragarse el contaminante, el lago se convirtió en lo que era, su vida.




No hay comentarios: