9 de julio de 2009

El libro de Pilar Rahola “Mujer liberada, hombre cabreado”

La semana pasada cuando regresaba del trabajo, en la calle había una caja llena de libros, nunca he podido entender la gente que deja en la calle “libros”. Para mi eso es como abandonar a mi mascota. Un libro nunca se debería tirar a la basura, hay montones de opciones para desprenderse de ellos, sin hacerles daño.

Entre los libros que había, “El hombre que susurraba los caballos”, dos libros de Jonh Dos Paasos, y varios más, había uno de Pilar Rahola. “Mujer liberada, hombre cabreado”. La verdad es que me hizo gracia el título, y la vistosidad de la portada.

Así que me lo llevé. Está semana lo he empezado a leer, ya que la semana pasada estaba leyendo otro “El monje que vendió su Ferrari” y no suelo dejar los libros a medias, a no ser que sean un tostón o no me enganchen.

La verdad, es que de Pilar Rahola todos hemos oído hablar, la hemos visto en el televisión de política, de colaboradora en debates, de mujer librada, con un ingenioso toque de feminista radical, que la verdad no creo que sea así, pero la imagen que da es esa.

A mi encantan las mujeres así, con esa fuerza, ese valor, esa templanza y saber estar y responder a todos esos que te quieren dar la vuelta o conquistarte para que al final llegues a creerte todo lo que quieren que creas. No la conozco a fondo para saber ni hablar de ella. Las veces que la he visto me ha gustado su forma de ser, en el libro habla de mujeres, de hombres, de la liberación de la mujer, del maltrato, de los roles adquiridos por nuestras antepasadas y que ha llevado a que durante siglos la mujer fuera un simple objeto de decoración para unos, una madre y cuidadora para otros, una mujer dominada para muchos, etc. vas leyendo y te vas introduciendo en un texto que te envuelve en el sentido, que si todo lo que pone se hiciera realidad, sería una maravilla. Es tan difícil que la mujer llegue a ser como el hombre, ya no más, sino igual en todos esos sentidos que quisimos que parece que estamos soñando.

Se que la sociedad podría cambiar muchas cosas, y con voluntad y fuerza se harían muchas más cosas que ahora, pero, ¿creen realmente que la mujer está preparada para salir de esa cascara que ha estado durante siglos?….., las palabras son muy bonitas, pero hacer lo que piensas o crees ya no es lo mismo. Algunas si, otras muchas no lo consiguen, es más cómodo pensar como siempre, hacer lo que hacemos siempre, para que cambiar….

Yo he cambiado, me sentí en mi vida como en muchos de los párrafos del libro de Pilar R., cuando leía ciertas paginas era como si estuviera viendo la película de mi vida, y llegó un día que dije, “se acabo”….y me fui. Así de fácil, aunque así de incomprensible para muchos. Yo si que lo comprendo porque lo que pasas durante la vida, si no es lo que deseas, tienes que atajarlo, cortarlo, sino se convierte en una pesadilla, un agobio, que hace que cada día las cosas sean peores, llegues a odiar a quien más deberías querer.

Yo me he liberado de muchas cuerdas, de muchas redes, no quiero decir con esto que la culpa de muchas cosa no fuera al cincuenta por ciento, pero no es escusa para que no haya tomado una decisión, que aún costando mucho, la tomé con todas las consecuencias.

Ahora, no me siento feliz, porque después de 20 años, la realidad es esa, pero me siento liberada, me siento libre, y quizás eso haga que poco a poco el tiempo me haga sentir feliz.

Le doy las gracias a Pilar Rahola porque ha descrito en muchas de las paginas de su libro, todas esas cosas que nos ocurren y que nunca contaremos, explica muchas situaciones en las que la sociedad las ve normales y no son normales, son inhumanas, pero ese rol que hemos creado de la mujer es un síntoma de enfermedad, y tenemos que erradicarla, darle medicamentos o antídotos para que desaparezca. A veces va bien que alguna mujer hable abiertamente, diga las cosas por su nombre, sin tapujos, sin miedo, porque, ¿porque no podemos decir lo que sentimos sin miedo a que pensaran los demás de nosotras?….Creo que se debe acabar esa manía que tenemos de callar, a veces llegan momentos en que debes decir lo que piensas, lo que sientes, pase lo que pase o se cabree quien se “cabree”.

No hay comentarios: