2 de junio de 2009

Nuevo rumbo, nueva experiencia

Hace unos días amigos os conté que estaba de reflexión, una semana sabática en la que tenía que decidir muchas cosas, meditar y sobre todo intentar poner mi vida en orden. Eso he echo, a pesar de todos los momentos que me he sentido totalmente desfallecida, con una ansiedad tremenda, con los nervios a flor de piel por mi decisión, ya está tomada.

Me he separado temporalmente de mi marido, llevábamos 20 años, son muchos años, muchas experiencias, muchas cosas y muchos sentimientos. Estos últimos días hemos vivido algo que nunca habíamos sentido, hemos hablado mucho, hemos sido casi, casi, como deberíamos haberlo sido desde el principio. Mucha culpa de eso, oen parte ha sido mía. Soy una persona que no me gusta abrirme totalmente, nunca digo todo, ni cuento todo. Crecí con un sentido de auto protección, algo que se hizo coraza para protegerme de daños venideros. Ahora pienso que quizás sea egoísta, pero es mi forma de ser.

Las experiencias en la vida marcan el carácter, la forma de ser de las personas y en gran parte la forma de vida. Eso a veces es bueno, pero a muchas personas se nos hace un nudo, un enredo del que es difícil salir. En algunos casos ese caos se transforma en un estado físico, psíquico del que no puedes salir.

Nos hemos dado un tiempo, un paréntesis del que podrá salir un refuerzo y una nueva continuación o un final de una relación. No lo sé, estoy totalmente confundida, o quizás no sería la palabra exacta, estoy en un momento de mi vida que no sé que hacer, no sé como debo encarrilar mi vida, es como si me hubiera perdido en el bosque y no supiera para dondé ir.

En estos momentos lo único que tengo seguro, claro y que me gusta es mi trabajo. En los sentimientos lo tengo más dubitativo, quiero a esa persona que durante 20 años me ha soportado, me ha querido y me ha dado muchas cosas, pero no sé si realmente es amor, o es eso que se siente por alguien que durante tantos años has compartido, todo o casi todo. He cometido muchos errores, y creo que por ese motivo estoy así. Solo deseo aclararme, sentirme que mi vida es diferente, que siento cosas, que estoy a gusto con lo que tengo. Si eso no se aclara no podré ser feliz.

¿Que difícil es la vida, las relaciones?…Ahora me siento extraña, vivo en un piso compartido, pero que es como si viviera sola, cada uno va a su vida, nadie se mete, nadie habla mucho y durante la semana todos están trabajando. Diferentes horarios, y así practicamente es como si viviéramos solos.

Está es una pequeña reseña de lo que me ha sucedido está semana, de lo que me hubiera gustado no pasará, pero llega un momento, quizás no le pase a todo el mundo, a mi si me ha pasado, que tienes que decidirte por lo que te guía la cabeza y no el corazón.

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